Suiza está considerando cortar temporalmente Netflix o Youtube para asegurar el servicio a actividades esenciales como el teletrabajo. España, sin embargo, ya ha superado con nota el incremento salvaje del tráfico online, un 700% en el caso de WhatsApp durante el primer sábado del confinamiento.

Tiene una explicación. España es el primer país europeo y tercero del mundo en conexiones de fibra óptica. La red española es mayor que la que suman, juntos, países de nuestro entorno como Alemania, Francia, Inglaterra, Italia y Portugal.

Esto hace que la penetración de la fibra sea del 74% en los hogares españoles, frente al 26% en Europa o el 15% en EE.UU.

Tenemos por tanto garantizado, el acceso a la red estos días, pero… ¿qué tal si la usamos con responsabilidad?

Psicólogos y expertos no desaconsejan en modo alguno el uso de las redes sociales e Internet, ya que nos permiten estar en contacto con los seres queridos, pero sí recomiendan prudencia y moderación. Es fundamental, por ejemplo, desconectar de las noticias sobre coronavirus ya que la sobre exposición a la información no hace que uno esté mejor informado y aumenta la ansiedad de forma innecesaria.

Más allá del horario del teletrabajo, donde se hace imprescindible el uso de Internet, hay muchas oportunidades de desconexión. Leer, escribir, cantar, bailar, realizar ejercicio físico en casa, hacer manualidades, cocinar, escuchar música o tocar algún instrumento son actividades que se pueden realizar sin la ayuda de la red.

Especialmente si se trata de jugar con los más pequeños, es el momento de dejar volar la imaginación. «Si hay niños, se debe contar con ellos para organizar el día. Son tremendamente imaginativos», apunta José Antonio Luengo, del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid. Además, leerles cuentos «ayuda a los adultos a entrar en un mundo de interpretación de la realidad que permite cambiar esquemas y mirar con optimismo».

El confinamiento, dicen los expertos, “es una buena oportunidad de aprovechar para hacer las cosas que nunca podemos hacer».

Otra idea en la que coinciden todos los especialistas en la necesidad de no improvisar, sino de «tener la sensación de que controlamos nuestra vida». Para ello, puede ayudar plasmar en papel una especie de horario adecuado a cada casa con las nuevas ‘tareas’. Muchas de ellas, serán, claro está, con la ayuda de Internet, en otras puedes muchas será el momento de sacar tu lado más humano.

Lo visto en los primeros días refleja por ejemplo, un descenso importantísimo del consumo de datos a las 20 h, a la hora en que se está popularizando el aplauso en el balcón a los profesionales sanitarios. Nos olvidamos por un momento de los smartphones e Internet y nos mueve a matar un poco al aislamiento social, aunque sea desde una terraza.

https://twitter.com/vodafone_es/status/1240046190206558210

Y es que, en tiempos de cuarentena, nunca viene mal desconectar (literalmente) un poco de las redes, incluso si éstas sirven para soportar el confinamiento.