15/10/2021

DigitalES, Asociación Española para la Digitalización, arranca hoy una serie de entrevistas a auténticos CRACKS de la tecnología en España. 

A través de esta serie semanal, queremos dar voz a esos profesionales TI que son absolutos genios de la tecnología. Queremos saber de ellos/as, conocer y reconocer el trabajo que realizan en estas empresas; saber qué les apasiona y qué consejos guardan para aquellos/as que vendrán detrás.


 

Alfons Buxó es una de las grandes voces autorizadas del Cloud computing. Alfons ha estado evaluando ejecutivos de nivel C en tecnología durante los últimos 20 años, y en la actualidad es el socio de consultoría responsable a nivel mundial de Cloud en Deloitte, además de liderar esta práctica en España.

Antes de incorporarse a Deloitte en 2018, había trabajado en el gigante de la tecnología Hewlett-Packard. Los últimos 5 años desarrolló su carrera en la sede de Hewlett-Packard Enterprise en Palo Alto, cuna de Silicon Valley, como vicepresidente y CTO Global para Go-to-Market y Cloud, habiendo sido anteriormente CTO para EMEA y previamente director de consultoría de preventa para España y Portugal.

Ingeniero Superior Industrial, especialidad eléctrica, por la Universidad Politécnica de Cataluña y MBA por ESADE, Alfons Buxó es, asimismo, un gran divulgador. De sus palabras se percibe la pasión que siente por una tecnología, dice, que está revolucionando el mundo y de la que apenas hemos visto todavía la punta del iceberg.

 

P.- ¿Por qué es revolucionario el Cloud?, ¿cuál es la gran disrupción que trae?

R.- Cloud ha sido un gran desconocido para el mercado en general. Desde que John McCarthy acuñó el término “Utility computing” en 1961, que derivó después en “Cloud computing”, muchas empresas han valorado como una opción para externalizar la infraestructura [informática] y pasar al pago por uso. Para los financieros esto es bastante relevante, porque en el balance les permite pasar gastos de capex a opex.

Pero es muchísimo más que eso: Cloud está democratizando el acceso a la innovación, tal y como Internet democratizó el acceso a la información.

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“Cloud Transformation consiste en plantear una transformación integral del negocio en la que la tecnología Cloud facilite el proceso”

 

La mayor parte de las empresas de todos los sectores están implementando o van a desarrollar modelos Cloud, pero implantar la tecnología no es suficiente. En Deloitte hablamos de una fase más avanzada denominada Cloud Transformation, es necesario plantear una transformación integral del negocio en la que la tecnología Cloud facilite el proceso.

Es decir, Cloud no es sólo software/plataforma/infraestructura como servicio, sino una revolución que está democratizando el acceso a la innovación en tecnología. Además, está creando nuevos modelos de negocio, donde puedes hacer cosas que antes eran imposible -o muy costosas-: personalización de productos y servicios, digitalización de la relación con clientes, toma de decisiones de negocio basadas en datos, etcétera.

Las posibilidades de este servicio van desde la optimización, modernización e integración de recursos a la simplificación de procesos. Quizá sea este aspecto el más conocido- permitiendo, incluso, la creación de un entorno o ecosistema personalizado que garantice la operatividad de los procesos y herramientas de los empleados.

 

P.- ¿Son las empresas conscientes de la magnitud de esta oportunidad?

R.- Estamos empezando a ver las posibilidades, pero todavía muy lejos realmente de alcanzar todo el potencial. De ahí radica la importancia de visualizar esta transformación desde una perspectiva más elevada como es el Cloud Transformation. Este modelo implica comprender el reto de cada compañía, para lo que es necesario tener un profundo conocimiento industrial del sector en el que opera, y poner los medios -en este caso, las tecnologías exponenciales coordinadas-, para solucionarlo.

No se trata de un proceso de adopción de la tecnología, sino de una adaptación integral del modelo de negocio.

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“Estamos empezando a ver las posibilidades, pero todavía muy lejos de alcanzar todo el potencial del Cloud”

 

P.- ¿En qué fase estamos?

R.- En términos generales, las empresas reconocen que Cloud les ofrece flexibilidad para hacer frente a la demanda. Esto es muy valioso para ellas. Antes, lo que se hacía era sobre provisionar la infraestructura para poder soportar esos picos, y eso resultaba excesivamente costoso.

Hace unos años la principal palanca eran los costes. En la actualidad, la gente valora la escalabilidad de dar servicios en función de una demanda fluctuante, la agilidad de nuevos productos y servicios, así como también las capacidades que permite en materia de innovación.

Además, las compañías utilizan Cloud como una diferenciación más rápida en su marco competitivo. El gran salto vendrá de todos esos casos de uso innovadores que nazcan a partir de la flexibilidad y la escalabilidad que aporta esta tecnología.

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Alfons Buxó, Global Cloud Transformation Leader, Deloitte

 

P.- En lo que llevamos de recorrido, ¿qué lecciones hemos aprendido?

R.- Hemos aprendido que hay ciertos servicios que tienen que ser commodity, abiertos e interoperables, porque no aportan un valor diferencial. Y estamos descubriendo los beneficios de diseñar nuevos productos y servicios de forma más ágil y a menor coste. Ahora puedes probar una innovación y, si no funciona, simplemente retirarla. Comenzamos a salir del plano techie para empezar a hablar de oportunidades de negocio.

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“Cloud te permite probar una innovación de forma simple y barata y, si no funciona, simplemente retirarla”

 

En definitiva, es la oportunidad de acceder a gran capacidad de computación y “experimentar” con ella para crear innovaciones que sí resulten diferenciadoras y permitan solventar los retos más complejos a los que se enfrenten las compañías.

 

P.- Conceptos como 5G, Internet de las Cosas, Inteligencia Artificial… ¿De qué manera se interrelacionan con el Cloud computing?

R.- Hay un dato que responde muy bien a esta pregunta: el 70% de los proyectos de Inteligencia Artificial y analítica avanzada, hoy en día, se ejecutan encima de Cloud, según se refleja en nuestro estudio Deloitte Tech Trends. En este punto, hay que reseñar la importancia de desarrollar capas de diferenciación aprovechando la tecnología; la IA o la analítica avanzada de datos sirven precisamente para eso.

Al final, migrar al Cloud te permite aprovechar cualquier tecnología existente para generar más valor sobre el negocio, sin limitarte por la capacidad de computación que puedas requerir.

Hay otra diferencia con respecto al modo en que se desarrollan estos nuevos modelos de negocio, y es que se aplica el principio de la “gravedad del dato”. Es decir, vas creando nuevas funcionalidades alrededor de la información que tienes, y no al revés.

 

P.- Estamos empezando a hablar de Edge computing, otra tendencia muy en boga…

R.- El Cloud se está extendiendo al Edge, precisamente porque los datos se generan en diferentes sitios, con diferentes naturalezas, diferentes condiciones técnicas (latencia, ancho de banda…) y diferentes regulaciones.

Pero, atención, porque una infraestructura informática descentralizada no implica que los datos del negocio no estén correctamente homogeneizados o consolidados, debidamente protegidos o tengan una buena trazabilidad. Esto no tiene tanto que ver con la arquitectura tecnológica, sino con la gobernanza o los modelos operativos de las organizaciones.

 

P.- ¿Qué otras tendencias son los hot topics en materia de Cloud?

R.- Claramente, el primer hot topic es el desarrollo de aplicaciones nativas. Está empezando ahora, y estoy convencido de que tendrá un gran impacto en el campo de las plataformas como servicio (PaaS).

En segundo lugar, todo lo que tiene que ver con el Machine learning y el Deep learning (Inteligencia Artificial).

Por otra parte, destacaría el gran impacto que tendrá el 5G, precisamente porque posibilita el Edge del que hablábamos antes, donde las comunicaciones y la latencia son ubicuas.

 

P.- En todo este contexto, que evoluciona tan rápidamente, ¿qué nivel de madurez digital presentan las empresas en España?

R.- La transformación digital es un campo muy amplio. Si nos fijamos en los niveles de adopción del Cloud, como palanca de esa digitalización en sentido más amplio, observamos que en Europa nos encontramos por delante de Asia, aunque creciendo más lentamente, y por detrás de mercados como el estadounidense.

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“Las empresas españolas tienen recorrido para situarse en la media europea en el salto a la adopción Cloud”

 

Y, dentro de Europa, España tiene recorrido para situarse en la media europea en el salto a la adopción Cloud. Ese es precisamente el gran reto en el que trabajamos desde Deloitte, procurando que las empresas aúnen tecnología y negocio, ayudando a los clientes a aprovechar el potencial de la tecnología Cloud y la inteligencia artificial con un enfoque centrado también en las personas.

De hecho, Deloitte ha sido de nuevo, por séptima vez consecutiva, reconocido por Gartner como líder en su prestigioso informe Magic Quadrant for Data and Analytics Service Providers,   precisamente por esto: por su capacidad de ejecución y por ofrecer una visión completa y acompañar a las empresas en su proceso de transformación end-to-end, sin perder el enfoque humano.

 

P.- ¿Se trata de que los proyectos de IT estén supeditados a lo que marquen las áreas de negocio?

R.- No, se trata de que exista una complicidad o un co-liderazgo entre ambas partes, aunando y orquestando las capacidades multidisciplinares de las organizaciones. Por un lado, buscas modos en que la tecnología puede ayudar a las iniciativas de negocio que tiene en marcha la empresa y, por otro, planteas qué nuevos casos de uso podrían surgir de aprovechar las innovaciones tecnológicas que existen.

En España estamos todavía al principio de ese camino. Esto se debe a que la adopción de Cloud ha estado tradicionalmente liderada por el departamento de IT. Es evidente que el CTO es un stakeholder crítico -yo mismo he sido CTO durante buena parte de mi trayectoria profesional-, pero el negocio no puede estar al margen.

 

P.- Otra posible causa es la escasez del talento…

R.- En España tenemos muchísimo talento. El problema es que no tenemos el suficiente para la demanda que hay.

Necesitamos un talento diferencial, perfiles con unas capacidades específicas, singulares y que entiendan al mismo tiempo bien el negocio, especializados por industria y por ámbito de conocimiento. Además, necesitamos que todas las empresas nos impliquemos en los planes específicos de formación que precisa la población.

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“En España tenemos muchísimo talento. El problema es que no tenemos el suficiente para la demanda que hay”

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P.- En cuanto al talento que sí existe en España, ¿consideras que es suficientemente bueno?

R.- Tanto es así, que buena parte de ese talento está trabajando fuera de España, donde son muy reconocidos. Tenemos la capacidad, pero nos falta la ejecución y la organización. Es un tema de voluntad.

 

P.- ¿Cuáles son los perfiles IT que más escasean?

R.- En primer lugar, hay mucha demanda de arquitectos Cloud por parte de empresas de servicios profesionales como la nuestra, clientes, suministradores, etcétera. También, de desarrolladores de aplicaciones en Cloud, capaces de aprovechar las potencialidades de estos entornos, creando por ejemplo aplicaciones distribuidas basadas en microservicios.

Asimismo, hacen falta más especialistas que gestionen la ciberseguridad y el cumplimiento de la regulación en este ámbito, desde la génesis de los proyectos hasta el cambio continuo. Tenemos que recordar que una plataforma es tan segura como el camino crítico de sus componentes.

Desde Deloitte trabajamos para formar al mejor talento y para que nuestros profesionales estén capacitados para resolver estos retos tecnológicos, porque la mejor formación (donde priman las certificaciones) es tener la oportunidad de trabajar sobre el terreno, resolviendo los retos reales de cada cliente.

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“Hacen falta arquitectos Cloud, desarrolladores de aplicaciones Cloud y especialistas en ciberseguridad”

 

P.- ¿Qué habilidades valoráis en estos profesionales, además del conocimiento técnico?

R.- La comunicación y la empatía, porque ese tipo de roles van a ser agentes del cambio. En Estados Unidos aprendí lo importante que es no solo saber hacer las cosas, sino también saber explicarlas y ponerlas en valor. Igualmente, es muy importante la capacidad de trabajar en equipo entre diferentes perfiles muy especializados y que lo hagan de forma muy coordinada.

 

P.- En tu caso, ¿qué es lo que más te motiva de tu trabajo?

R.- Una de las cosas que más satisfacción profesional me aporta es poder colaborar a inventar el futuro, no administrar el pasado. Cómo generar nuevas soluciones, cómo ayudar a los clientes, cómo innovar, cómo ayudar a desarrollarse a nuestros profesionales…, todo se apoya hoy en día en tecnología.

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“Los tecnólogos nos dedicamos a inventar el futuro, no a administrar el pasado”

 

Esa pasión por lo que hago, por el propósito de mi trabajo, me anima a estar constantemente leyendo y formándome para no quedarme atrás. Dedico tiempo a la formación, a leer artículos, publicaciones o casos de clientes, y también me enriquece mucho personalmente hablar con clientes y con otros expertos en la materia.

 

P.- Por último, volvamos a aquellos años que trabajaste en Silicon Valley. ¿Cuál es el aprendizaje más valioso que te trajiste de allí?

R.- Los europeos somos muy buenos explicando por qué algo va a ser muy complicado. En cambio, los estadounidenses no se autolimitan.

Hay batallas a las que ya llegamos tarde, pero sí deberíamos tomar ejemplo de esa actitud positiva y centrarnos en aquellos ámbitos donde sí que podemos ofrecer una diferenciación: tecnologías que estén centradas en los datos y en los casos de uso. Europa tiene una oportunidad en definir ciertos estándares y trabajar en ellos conjuntamente. Es una ventana de 24 o 36 meses. Por supuesto que creo que lo conseguiremos.