07/11/2024
El pasado 29 de octubre, cuando la terrible Dana se llevó por delante casas, coches e infraestructuras de todo tipo, también lo hizo con aquellas que sirven para que podamos comunicarnos. Se calcula que 300.000 personas se quedaron sin telefonía móvil, y 220.000 sin telefonía fija. La conectividad y otros servicios esenciales como la electricidad y el agua, se revelaron imprescindibles para salvar vidas.
Una semana después, el 91% de los clientes de teléfono fijo han recuperado su línea, mientras que un 68% de los usuarios de móvil (unas 204.000 personas) ya disponen de conectividad. Son datos aportados el martes 5 de noviembre por el Ministerio para la Transformación Digital.
El trabajo está siendo arduo para los operadores de telecomunicaciones, que se han volcado desde el primer momento en atender a los afectados. Su primera medida fue ofrecer datos ilimitados y gratuitos a todos los residentes de las zonas afectadas por la catástrofe, así como llamadas gratuitas. La medida se extendió también a los distintos grupos de emergencia que están realizando labores en la zona para facilitar las comunicaciones en sus trabajos.
Pero quedaba lo más difícil. ¿Cómo dotar de conectividad a unos ciudadanos que habitaban en zonas aún no accesibles, con infraestructuras dañadas y cortes de servicio eléctrico? La dificultad era enorme para todos, pero igual que los servicios de emergencia y los miles de voluntarios, los operadores hicieron todo lo posible por llegar entre los primeros a aquellos lugares donde los necesitaban con urgencia.
En situaciones trágicas como esta, la conectividad es vital: permite coordinar equipos de rescate, mantener informada a la población y asegurar que las familias puedan estar en contacto con sus seres queridos. Compañías como Digi, MasOrange, Telefonica o Vodafone son conscientes de esta necesidad y están respondiendo con todos sus esfuerzos, poniéndose al servicio de la comunidad y demostrando empatía y compromiso con las zonas afectadas.
Para restituir las comunicaciones, los primeros trabajos se han centrado en desplegar estaciones móviles temporales para mantener conectadas a las zonas afectadas. No siempre ha sido algo inmediato. Hay zonas tan devastadas que a día de hoy sigue sin restablecerse el servicio por completo, pero se ha entendido como una prioridad y en ello se trabaja sin descanso.
Así lo demuestran el número de efectivos destinados a ello. El número de operarios y personal desplazado a la zona para restablecer las comunicaciones de voz y datos supera los 500 efectivos entre todas las compañías. Como ha destacado David Martinez Pedrales en linkedin: las redes de telecomunicaciones son personas trabajando en las redes de comunicaciones.No olvidemos que Internet es imprescindible para los centros de salud o para la entrega de medicamentos. Es vital mantener un control de todo aquello de lo que se dispone o se dispensa, y para eso es necesario que la Red funcione a pleno rendimiento.
Agustín y Julio, del Grupo de Operaciones de Telefónica, junto con todo el equipo desplegado, llevan trabajando desde el primer día para restablecer las comunicaciones en Valencia.
¡Gracias en estos momentos tan difíciles! 💪
Vídeo: @laSextaTV pic.twitter.com/dzKCH3UNod— Telefónica (@Telefonica) November 6, 2024
Donaciones, apps y apoyo al voluntariado
Y no solo se trabaja por el restablecimiento de la conectividad. También hay otras necesidades ante las que las empresas que forman parte de la patronal DigitalES han respondido, como las campañas de donación y el impulso al voluntariado. Así, empresas tecnológicas, fabricantes y consultoras han participado en iniciativas para recoger fondos y material de ayuda para las zonas afectadas, colaborando con ONGs y otras organizaciones para poner al servicio de los afectados su logística, voluntarios, o red de distribución.
La tragedia ha puesto a prueba la resistencia de todo un país y sus recursos públicos, y ha demostrado la solidaridad de vecinos, ciudadanos y empresas. Los operadores de telecomunicaciones han respondido sin eludir tiempo ni esfuerzo en afrontar la adversidad junto a tantos españoles que, sean de donde sean, estos días se sienten muy cerca de las víctimas de la DANA.