21/04/2025

Europa lo tiene claro. Quiere plantar cara al liderazgo de Estados Unidos y China en inteligencia artificial y convertirse en líder global en esta tecnología. Y para ello ha anunciado una inversión sin precedentes en IA que se concretará en la construcción de 13 gigafactorías que le permitirían romper la dependencia que hoy tiene de otras regiones. 

La región, que quiere triplicar su capacidad en centros de datos en los próximos siete años, impulsará la creación de estas infraestructuras de gran escala, que estarán equipadas con más de 100.000 procesadores de IA de última generación. Estas gigafactorías podrán entrenar modelos avanzados de inteligencia artificial en campos como la medicina, la biotecnología, la industria, la robótica y la investigación científica   

El coste estimado para construir cada una de ellas oscilará entre los 3.000 y los 5.000 millones de euros, según se recoge en la convocatoria de interés publicada por la Comisión Europea. Se espera que estas instalaciones sean cuatro veces más potentes que la actual red de factorías IA que está desplegando la Unión Europea. 

Gigafactorías Mare Nostrum Barcelona

Imagen del Barcelona SuperComputing Center, donde se instalará una de las 13 gigafactorías de IA

La primera fase del plan destinará 20.000 millones de euros para crear nuevos centros en los que alojar algunas de las supercomputadoras más potentes del mundo. Con ello se pretende reducir la ventaja que algunos competidores de Europa han tomado en el desarrollo de la inteligencia artificial. Un informe de la Universidad de Stanford indica que en 2024 había 40 modelos de IA potentes en Estados Unidos en 2024, por 15 de China y solo tres europeos, todos ellos franceses. 

Otro informe de esa misma universidad desvela que ningún país de la UE figura entre los cinco primeros por su “vitalidad” en el campo de la IA, un parámetro que tiene en cuenta la inversión privada, las patentes y la investigación. El ranking está comandado por Estados Unidos y China, a los que siguen el Reino Unido, India y Emiratos Árabes Unidos. Francia ocupa el sexto lugar, Corea del Sur el séptimo y Alemania el octavo. 

Simplificar las regulaciones 

Para reducir esta desventaja no bastará con construir grandes gigafactorías. Europa lo sabe y por eso la UE ha anunciado otras medidas en su recién publicado ‘AI Continent Action Plan’, documento con el que la Comisión Europea persigue «racionalizar» las normas y deshacerse de los «obstáculos» que, en su opinión, frenan a las empresas europeas a la hora de competir con Estados Unidos y China. 

El primero de ellos es reducir la dependencia de la infraestructura no perteneciente a la UE. Existe preocupación por la supeditación de Europa a los proveedores estadounidenses de nube y centros de datos. Aunque la comisaria de Soberanía Tecnológica, Seguridad y Democracia, Henna Virkkunen, no ha dado detalles acerca de hasta qué punto el plan se desarrollará con tecnología europea, sí ha insistido en que Europa está  tratando de desarrollar sus propias capacidades. 

Otro punto importante del plan es la simplificación de regulaciones. La Comisión planea «agilizar» las normativas y reducir la posible carga de cumplimiento asociada con el Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial, que dificulta la competitividad de las empresas en este terreno. Aunque la legislación es muy reciente y apenas se ha implementado, la nueva estrategia pretende revisar toda la normativa para tratar de reducir la burocracia para las pymes y grandes empresas.

Más movimientos importantes. La UE pedirá a la industria tecnológica que identifique las áreas donde la incertidumbre regulatoria crea “obstáculos”. Esta llamada a la participación de la industria puede suponer un impulso clave para acelerar el uso de una tecnología que hoy solo han adoptado un 13% de las industrias en Europa.

Por último, el plan quiere poner el foco en áreas clave y por ello se centrará en impulsar los laboratorios de datos (DataLabs) dentro de las fábricas de IA para el acceso a datos de alta calidad, y en promover la formación en IA y la mejora de las habilidades entre los trabajadores, que se vehiculará a través de becas y de la creación de academias de IA. 

¿Serán suficientes estas medidas para reducir la distancia respecto a otros polos de desarrollo de la inteligencia artificial? ¿Llegan a tiempo? Como señalan desde la Comisión Europea, Europa tiene muchos “activos” para convertirse en un “líder importante” en esta industria.  Es solo cuestión de jugar bien las cartas y mantenerse en la carrera.