2024 será el año del 5G. Esta es la apuesta tecnológica clara para la conectividad móvil del futuro, no solo en el entorno urbano, también en el rural y más concretamente en las zonas de la España vaciada, aunque en el sector prefieren mentarlas como zonas blancas.

Si bien, para poder seguir invirtiendo e impulsando esta tecnología las grandes firmas del sector de las telecomunicaciones en España apuestan por la colaboración público privada y piden a las administraciones un «empujón» para agilizar el despliegue del 5G y reducir la brecha digital existente. Así lo han apuntado los principales directivos de este mercado en el Foro empresarial «Las recetas del 5G español para liderar Europa», organizado por elEconomista.es

Según la secretaria de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, María González Veracruz, que abrió el foro, «ahora, nuestro objetivo es que el 75% de los españoles tenga, lo que llamamos, 5G puro (5G+) para el 2025″. España está a la vanguardia del despliegue de fibra, con más de 35 puntos por encima de la media europea». Actualmente, la tecnología representa un 22% del PIB español, por lo que, en palabras de la secretaria de Estado, «la acción de la digitalización es imprescindible, pues la economía digital es un palanca clave para España».

En el encuentro también se habló del 6G y de las condiciones para la llegada de la próxima generación de conectividad. Según el director general de DigitalES, Victor Calvo-Sotelo, «quedan decenas de miles de millones de inversión para el 5G, pero sí, hay que comenzar a plantear la implementación del 6G y hacerlo desde un punto de vista transversal, tanto tecnológico, como económico, de seguridad o regulatorio».

No obstante, toda nueva tecnología nace con retos y desafíos que debe resolver. El primero, el de la rentabilidad para las empresas responsables de hacer toda la inversión necesaria para el despliegue de la red. «Hay que mirar al futuro desde los retos de hoy, como es el crecimiento del 5G. Si resolvemos los problemas actuales anticipamos los de la siguiente generación. Faltará por ver como se regula desde el punto de vista de Competencia, que ha sido muy exigente con el sector, ha traído cosas buenas, pero también ha provocado que compañía se encuentren con retornos de inversión incluso por debajo de su coste de capital», lamentó el dirigente de la asociación DigitalES.

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